Disyuntivas

Se entiende por disyuntiva a toda aquella situación en la que se dé un conflicto entre diferentes opciones de actuación disponibles. Se trata de situaciones en que no existiendo una solución totalmente buena y otra opción totalmente mala, teniendo ambas repercusiones positivas y negativas a la vez.

Entre lo malo y lo peor

Es bastante frecuente que nos encontremos repitiendo cosas una y otra vez,  aunque no nos gusten. Y no siempre es porque nos veamos obligados, sino porque la alternativa que se nos ocurre es igual de indeseable o peor. Es decir, nos vemos atrapados en disyuntivas.

Y no nos damos cuenta de que tal vez existan otras opciones de comportamiento y por eso nos debatimos entre lo malo y lo peor.

Pongo algunos ejemplos que es probable que nos resulten familiares.

Algunos ejemplos de dilemas

Me planteo mantener mis sentimientos bajo control, bien guardados de las miradas indiscretas, lo que me acarrea aislamiento; o me arriesgo a que pasen de mi, o a que diga algo que haga daño a los demás y que acabe provocando un desastre. Esto es un dilema: ninguna de las dos opciones me deja tranquilo.

Sigo con los ejemplos.

Si me permito algunos pequeños placeres de la vida siento que soy una egoísta; si no me los permito me pongo bastante triste y me parece que la vida es árida y aburrida.

Basta que algo esté prohibido o sepa que es perjudicial para mí para que me apetezca hacerlo.

O mantengo todos los aspectos de mi vida en perfecto orden o temo que ocurra una desgracia.

Si me implico en una relación afectiva temo que me acaben haciendo daño; si no me implico y me mantengo a la defensiva, me siento sola.

También puedo alternar entre mirar a los demás desde las alturas de mi superioridad o sentir que son los demás los que me ven como una alfeñique y me dirigen miradas despectivas.

Si me comprometo con los demás me siento dentro de una trampa y manipulada; si me protejo de esa eventualidad me siento abandonada.

Aún podría seguir poniendo ejemplos de estas trampas que nos tendemos a nosotros mismos.

Existen otras posibilidades

No olvidemos que existen otras posibilidades, y que asumimos secuencias del tipo “Si hago tal cosa… entonces ocurrirá tal otra” que no tienen que ser ciertas necesariamente.

Es recomendable que pongamos a prueba nuestras hipótesis sobre la realidad, y si comprobamos que no se confirman, que las cambiemos por otras más adecuadas.


Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies